Proponemos una pastoral significativa que favorezca el conocimiento y la experiencia de Dios, desde la Espiritualidad Ignaciana.
Las vivencias pastorales que se proponen quieren posibilitar el crecimiento integral de los alumnos y alumnas, dotando de más profundidad su vivencia personal, sus relaciones, el compromiso con la transformación del mundo desde el Evangelio y el encuentro con el Señor.
Buscamos que el alumno, a lo largo de los cursos y etapas, viva un proceso de maduración de su personalidad y de su fe, desde el conocimiento de Jesús y el Evangelio.
Nuestra pastoral en cada etapa se desarrolla desde el proyecto de Líneas de fuerza, que cada año, anclado en una clave de la espiritualidad ignaciana, propone un lema que da sentido a las actividades que se realizan en el centro.
El acompañamiento pastoral de los alumnos ofrece un espacio cuidado y respetuoso en el que se intenta escuchar y comprender a cada persona: su situación vital, sus motivaciones, decisiones, preocupaciones, opiniones, deseos… Se trata de ayudar a que ellos pongan palabras a lo que van haciendo y viviendo en su proceso personal. Esta misma posibilidad se ofrece a educadores y familias.
Queremos educar para la vida. Como opción preferente de la Compañía de Jesús, se quiere acompañar a los jóvenes en la creación de un futuro esperanzador. Ayudarles a hacerse preguntas y buscar respuestas, a encontrar el sentido de sus vidas y a tomar decisiones como respuesta a su propia vocación, es un proceso que comienza en la adolescencia y culminará, más adelante, cuando descubran su lugar en el mundo y el proyecto de Dios para sus vidas.
Ofrecemos experiencias en las que participan alumnos de muchos colegios de la Zona Sur (Andalucía, Extremadura y Canarias). Tratan, junto a la pastoral colegial, de acercar al alumno el binomio fe-justicia. Las experiencias que se ofrecen suponen un CAMINO que comienzan con la convivencia de 6º de primaria, y sigue con la peregrinación de 1ºESO, Prepascuas de 2º-3º ESO, convivencia en Javier (Navarra) en 4º ESO, Pascuas, Campos de Trabajo y Camino de Santiago para Bachilleratos y Ciclos Formativos. Suponen un momento de encuentro con ellos mismos, con otros y con Dios, que les ayudarán en su crecimiento personal.
La vivencia de grupos en horario no lectivo, permite a los alumnos experimentar el sentido comunitario de la fe, fomenta el compromiso con el mundo a través de voluntariados, y ofrece tiempos serenos para la reflexión y celebración de lo que acontece en su vida. En algunos casos, se siguen procesos catequéticos que preparan a vivir los sacramentos.
Desde la pastoral queremos contribuir a que la relación de las familias con el colegio sea más cercana. Buscamos que las familias sean partícipes en el desarrollo de la pastoral y destinatarias de propuestas que ayuden en la educación de sentido y en la fe de sus hijos.
A través de la propuesta pastoral queremos que los educadores se sientan cuidados, escuchados e invitados a participar de las experiencias de sentido de vida y fe que se ofrecen tanto para ellos mismos, como acompañando a alumnos.